Nuestros canales de comunicación en Internet, especialmente el correo electrónico y la página web, también están sujetos a la LOPD si de algún modo recabamos datos de carácter personal.
No hace falta que sean muchos ni muy sensibles, basta con un simple formulario de contacto donde un usuario pueda poner su nombre o su e-mail, para que estemos ya sujetos al cumplimiento de la LOPD. Especial cuidado hay que observar –puesto que las sanciones pueden ser mucho mayores–, si por cualquier motivo recabamos datos especialmente sensibles (tarjetas de crédito, preferencias políticas, orientación ideológica, etc.).
Si además ofreces servicios que un usuario puede contratar por Internet, tienes una plataforma de tienda online, o envías publicidad por Internet, has de tener en cuenta también la Ley 34/2002 de Servicios de la Sociedad de la Información (y Comercio Electrónico) (conocida como LSSI o LSSICE). Parece complicado pero no te preocupes, ¡en Prestigia nos ocupamos de todo!